Técnicas de Construcción
Fabricación del Adobe

De incluirse paja en la composición de los adobes, ésta debe suponer entre una tercera y una cuarta parte de la mixtura y debe ser añadida a la mezcla fresca y homogénea obtenida tras el amasado. Las fibras empleadas deberán haber sido picadas, manualmente o empleando trillos, hasta una longitud de unos 5 cm. Si son excesivamente cortas, no tendrán capacidad suficiente para evitar la fisuración de las piezas. Por el contrario, si son demasiado largas, reducirán la trabajabilidad de la mezcla, dificultarán su moldeó y favorecerán la aparición de huecos en los adobes. Una vez añadida la paja, la mezcla resultante se amasa de nuevo, añadiendo agua si es necesario, y se deja reposar entre uno y tres días. Este proceso, que se denomina dormido, se debe llevar a cabo en un lugar cobijado del aire o cubriendo la mezcla con mantas o lonas para minimizar la evaporación de agua. El dormido tiene por objeto permitir la completa hidratación de la arcilla contenida en la mezcla y evitar que se formen nódulos de tierra seca.

